Un trabajo para este pobre estudiante de diseño

Soy de las pocas personas que pueden decir que 'trabajo desde chica', pues, que yo recuerde, empecé a trabajar con un tío armando, desarmando e instalando computadores. A veces recibía un pequeño monto de dinero a cambio de la ayuda, en general lo hacia (y sigo haciendo cuando puedo) para mantener mi computador asegurado. Eso cuando tenia unos 14 años.

Años después, y cuando salí del colegio trabajé en mi practica profesional, en un jardín. No algo que me gustara mucho, pero lo hice de todas formas, y sin recibir ni un cobre a cambio.

Después, y cuando estaba en mi año sabático me dieron la oportunidad de trabajar como empaque de supermercado. No necesitas experiencia, no necesitas nada, solo estar estudiando y presentar papeles de antecedes. Un trabajo no complicado, pero si muy exigente, físicamente. Eso de estar tres o cuatro horas de pie, metiendo las cosas que la gente compraba en bolsas y ordenándolas en los carros por algunas monedas era bueno, malo, pésimo o aceptable. Duré un año, no porque quisiera, por mi, seguiría trabajando, pero a los jefes del supermercado se paró la pluma y nos pusieron de patitas en la calle a aquellos que ya teníamos mas de un año en la 'empresa'. No lo tomé a mal, me molesté, claro, pero lo tomé como una oportunidad para buscar algo en donde ganara algo fijo y con todos los beneficios que uno tiene al estar contratado.

Así fue que después de unos meses sin hacer nada me llegó la oportunidad de un nuevo empleo. En Las Condes, en Homy, un área de la tienda Homecenter. El trabajar no es tanto, lo que en general aterra es la mendiga entrevista.

Recuerdo que una vez fui a una. Una tía, que ha ido a muchas entrevistas en su vida, me dio un par de tips, como si te hacen el test de Rochard ve cosas lindas, si te preguntan por tu vida eres la mujer mas feliz del planeta, etc. Recuerdo que esa primera entrevista me veía segura pero nerviosa. Cosa que con esta lo superé por completo. Ni siquiera un temblor de quien sabe cuanto, pero de larga duración me puso nerviosa!

Cuando me entrevistaba la gerente de la tienda contesté segura de mi misma, aunque creo que esta vez fue mucho. La miraba a los ojos como esperando la siguiente pregunta. Me dio verborragia Norén por un minuto. Ademas me sentí la mas loser cuando me preguntó por mis notas de titulo técnico (7,0 la nota de practica y 6,7 nota de titulo, una de las mas altas de todo el curso). Creo que le llamó la atención el que fuera así. O sea, quizás es bueno que si vas a trabajar vendiendo cosas, con publico, debes tener un poco de verborragia y no ser una niña retraída, pero creo que lo de hoy fue mucho. Aunque a la señora le gusto.

Terminó diciendo ese cliché 'te llamamos'